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2019

«Los científicos han descubierto que la práctica de mindfulness a largo plazo altera las estructuras cerebrales. También provoca un aumento del grosor en ciertas regiones del cerebro y cambios en las vías neuronales que conducen a un menor distracción, una mejor concentración, un enfoque redirigido, una mayor conciencia emocional y un mejor sistema inmunológico».

El cerebro del meditador – Nazareth Castellanos

Beneficios de la Meditación – Nazareth Castellanos

Cerebro, corazón y microbiota – Nazareth Castellanos